Cebollas

Para una mejor conservación, guarda las cebollas en un lugar fresco, seco y oscuro, como una despensa o un sótano. Evita almacenarlas en el refrigerador, ya que la humedad puede hacer que se pudran más rápido. Tampoco las almacenes cerca de las patatas, ya que liberan gases que pueden acelerar el deterioro de ambas.

Hay varios trucos que puedes probar para reducir el lagrimeo al cortar cebollas. Algunos incluyen enfriar las cebollas en el refrigerador durante unos 30 minutos antes de cortarlas, usar un cuchillo muy afilado, encender una hornalla de la cocina, o cortar la cebolla bajo un chorro de agua fría. También puedes usar gafas protectoras.

Las cebollas son increíblemente versátiles y se pueden usar en una gran variedad de platos. Son la base de muchas salsas, sopas y guisos. Se pueden caramelizar para agregar un toque dulce a las hamburguesas o pizzas, o se pueden usar crudas en ensaladas y sándwiches. También se pueden asar, freír, hornear o utilizar como relleno.

Sí, las cebollas son una buena fuente de vitamina C, fibra y antioxidantes. Se cree que tienen propiedades antiinflamatorias y antibacterianas, y pueden ayudar a reducir el riesgo de enfermedades cardíacas y ciertos tipos de cáncer.

Para eliminar el olor a cebolla de tus manos, puedes frotarlas con una cuchara de acero inoxidable bajo el agua fría. También puedes lavarlas con jugo de limón o una pasta hecha con bicarbonato de sodio y agua.

Sí, puedes plantar cebollas que han empezado a brotar. Plántalas en tierra fértil y bien drenada, asegurándote de que el bulbo esté cubierto en su mayoría. Es posible que no produzcan cebollas grandes, pero puedes usar las hojas verdes como cebollino.

Si bien todas las cebollas son nutritivas, existen ligeras diferencias. Las cebollas amarillas tienen un sabor más fuerte y se cocinan bien, las cebollas blancas tienen un sabor más suave y son mejores para comer crudas, y las cebollas rojas tienen un sabor dulce y suave, ideales para ensaladas y encurtidos. En cuanto a los nutrientes, las cebollas rojas tienden a tener más antioxidantes.